Regresandito

Tenía tiempo sin publicar nada, no es por falta de material o de temas, en este pedacito de sur abundan, es que de verdad no he contado con el factor tiempo. Hablando del gobierno, veo a un presidente que movilizó una gran parte del país, pero que hoy luce cansado, son trece años de discursos y de buenas intenciones, que no cuajan, que no echan raíces porque el estado con la finalidad de "no dañar el proceso" se ha vuelto alcahuete, y  tapan los templos a la corrupción chavista: el CAEZ y la Vueltosa por solo mencionar dos.
Pero hablemos sobre la otra acera, la mal llamada oposición venezolana, que hoy se congrega en la MUD, quienes celebraron las primarias el doce de febrero. Confieso que miro con recelo a los que hoy la conforman, especialmente sus líderes, quienes han acompañado a Chávez en esta locura revolucionaria, dándole apoyo casi directo a su pésima gestión, especialmente a los partidos políticos, que como AD, madre del presidente, buscan incansablemente un papel protagónico a pesar de las constantes burradas de sus dirigentes, especialmente del Ramos Allup.
Copei, el padre de la criatura hoy no da pie con bola, la pava de su hijo los carga loco de a peo, aunque con un hijo así cualquiera se desequilibra. Tal parece que ha sido Primero Justicia quién por ahora les ha ganado la competencia.
Y mientras tanto mi querida Venezuela transita su peor episodio en la vida republicana: asesinatos, robos, invasiones, inmoralidad, corrupción, y un largo etcétera se adueñan de las calles, y nos mantienen en constante temor, porque las autoridades no cumplen su función. En este país se necesita un gobierno con las bolas bien puestas, a nuestras cárceles debe llegar el trabajo obligatorio y la re educación de los los reclusos, para así acabar con la ociosidad. Nuestros jóvenes, o estudian o trabajan, no pueden seguir por las calles sin actividad productiva. Las leyes deben dejar de ser letra muerta, y su cumplimiento debe comenzar desde el gobierno.
Venezuela necesita un gobierno que gobierne, y que sus habitantes se conviertan en ciudadanos, solo así transitaremos hacia la patria grande con la que soñó Bolívar.